Con dos canales temáticos y uno de música, en vivo las 24 horas,
MemoRadio difunde un archivo en constante crecimiento de más de 250 mil registros sonoros para ser
expuesto dinámica y temáticamente con la premisa de que la memoria de la radio, es en si mísma la memoria de la
humanidad, en un vínculo inseparable en que la historia contó acerca de la radio, y también la radio
contó de la historia. Y más que el mero relato, una fue la otra, o sea la radio también, "hizo la historia".
Es pues, que realizamos este proyecto con ese sentido y con tres "
apelaciones":
· Simbiosis de la memoria individual y colectiva
· Factor social y constitutivo de la radio
· La radio hace memoria, y la memoria hace radio
La memoria.
Se dice que como facultad del intelecto humano, la memoria es la capacidad de recordar datos y acontecimientos. Y
como sustantivo a la vez es el conjunto de imágenes, de hechos o situaciones pasados que como producto de esa
facultad antes descripta quedan en la mente de cada uno de nosotros.
Pero además, ni es meramente una habilidad del cerebro de retener información y recuperarla voluntariamente, ni un
cúmulo de recuerdos que cada individuo atesora para sí y que le pertenece, ya que la memoria tiene tanto valor
personal como también grupal.
En efecto, esta función de la inteligencia de los seres humanos tiene una doble dimensión: una individual y una
colectiva. Y es a esos dos conceptos que
apelamos aquí: simpre uno substentando al otro, en íntima, honda e
inseparable coexistencia, casi de condición biunívoca necesaria y suficiente.
Memoria colectiva como término hace referencia a todos aquellos aspectos que forman parte del legado de una comunidad
y con él se expresa un marco social para la memoria.
Y es que, si bien la memoria colectiva (o mejor dicho "compartida") hace referencia a todos aquellos aspectos que
forman parte del marco social del legado de una comunidad, creemos que tambien la memoria individual (o mejor dicho
"paticular") no sólo puede ser parte inclusiva de la anterior, si no que una es también (o mejor dicho "constituye") la otra.
Quienes han nacido en un mismo periodo histórico suelen tener recuerdos del pasado muy semejantes y es habitual que
retengan en su memoria por ejemplo, la música que escuchaban o los filmes o programas de televisión que veían. Y por eso todas
las generaciones están unidas por algunas vivencias que van más allá del plano personal.
Y ademáss no es necesario haber vivido una experiencia para que el conjunto de la sociedad la recuerde, ya que ciertos
acontecimientos están en la memoria del conjunto de la sociedad aunque no se hayan conocido de primera mano. La
humanidad en su conjunto tiene una memoria sobre momentos cercanos y lejanos en el tiempo, ya que el pasado remoto
también forma parte de la memoria colectiva de cualquier generación.
La radio.
Más allá de hacer una definición "técnica"
1 de la radio (entendiéndola en su conjunto, y no meramente como
acópoque de "radiodifusión") aquí tambien
apelamos a dos aspectos particulares de la misma: su función social y su
particular constitución (el sonido).
De lo primero nos referiremos más adelante, y sobre el sonido, tambien escapando de definirlo técnicamente
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queremos aquí apelar a una de sus características: el sonido (su "sensación") tambien pude ser "memorizado".
En efecto, el sonido no es meramente "aire que se mueve", si no que por efecto de la capacidad intelectual de la
memoria puede ser "recordado".
Y en el plano social, desde el inicio mismo del desarrollo de la radio, ésta fue concebida como "medio" ("media" como
plural de "medium" en inglés) o instrumento de transmisión pública de información. La radio se hizo para
"comunicar", vale decir, hacer partícipes a los demás de lo que uno cree o conoce.
Simplificando y unificanco, la radio es pues, sonido recorriendo el espacio llevando conocimento, información,
ideología o meramente entretenimento.
1 Medio de comunicación que se basa en el envío de señales en general de audio en general a través de ondas
electromagnéticas.
2 Sensación o impresión producida en el oído por un conjunto de vibraciones que se propagan por un medio
elástico, como el aire.
La memoria y la radio. La radio y la memoria.
La radio es sonido... el sonido es recuerdo... el recuerdo es memoria... y ¿en viceversa? A eso también
apelamos.
Entre todos los recuerdos, el sonido tiene la capacidad de desatar una verdadera sinestecia que nuestra mente ha
atesorado. Y quizás por su sencillez de ese estímulo, probablemente ese "disparo" que genera una grande cadena de
recuerdos, pueda ser más efectiva que cualquiera de los mejores y completos relatos, de las mejores imágenes, etc.
Puede ser tan simple como una melodía, una voz o hasta un aviso publicitario que resulte de chispa detonante de
recuerdos muchos más complejos que constituyen nuestro pasado, sea éste de caracter personal o colectivo.
Es claro que la radio tiene una gran limitación física... enajena todos los sentidos, menos uno: el acústico. Y
aunque no parezca posible, no requiere de ningún otro.
No necesita más... Nos comunicamos con "imágenes", pero la radio no necesita "mostrarselas" a ningún otro sentido que al oído,
pues el radioescucha se convierte en un "invidente involuntario". No obstante en la radio, el lenguaje es "visual", y se
logra ese cometido porque las imágenes están en la mente del receptor (y muchas veces en su memoria), y la radio
sólo tiene que evocarlas. Del resto se encargan los otros sentidos, que interactúan en armónica sinestecia para
activar otra de las facultades superiores del intelecto: la imaginación.
El emisor sólo necesita del habla humana (la voz), de la naturaleza, animales y objetos (los sonidos naturales o ambientados),
el habla de los lugares
y las emociones (la música), y hasta del silencio, ya que en radio, aún la ausencia de sonido (sus silencios y pausas a veces
exprofesas o causales) son también expresivas y parte de la narrativa "acústica".
Si el lenguaje radiofónico (palabra, música, sonidos y silencios) se encuentra bien estructurado, adecuadamente utilizado y
oportunamente emitido puede crear ambientes, escenarios, decorados, vestuarios, climas, sentimientos, ilustraciones, alegrías
y hasta miedos y temores, dándole incluso al medio el poder de transformar lo que es una comunicación eminentemente pública
en algo privado... en algo que particularmente atesora cada uno de los oyentes.